- Deja ya de preocuparte por tantas cosas secundarias que no necesitas. Evitarás la angustia.
- Deja de preocuparte por el mañana. Para la mayoría el mañana es el hoy. ¡Sirve! ¡Ayuda!
- Deja de estar molesto por naderías que la mente suele ampliar y agigantar. Así no vivirás ni dejarás vivir a quienes están a tu lado.
- Deja de preocuparte por todo cuanto no está en tus manos y que no puedes controlar. Cosecharás congoja.
- Deja de sentirte humillado porque te han herido el amor propio, que ahora grita. Nos hace falta más humildad y menos yo.
- Deja ya de torturarte por lo que han dicho de ti. Tú actúa rectamente. Necesitamos más vida espiritual.
- El Dr. William James, profesor de la Universidad de Harvard y padre de la psicología moderna norteamericana, enseñaba a quienes vivían preocupados, turbados, nerviosos, ansiosos: “La mejor cura para la preocupación es la fe religiosa, es la vida espiritual”.
Texto de Mn. J.M. Alimbau